La apraxia es un trastorno del sistema nervioso y cerebral. Este trastorno dificulta o imposibilita que la persona que lo padece pueda realizar sencillos movimientos o tareas aprendidos previamente.

La apraxia aparece como consecuencia de algún tipo de daño cerebral, como por ejemplo enfermedades neurodegenerativas

En nuestro día a día ejecutamos miles de movimientos que no nos causan problema alguno. El simple acto de abrir una puerta, preparar un vaso de agua, vestirse, etc. los hacemos puesto que hemos aprendido lo pasos para hacerlo. Las personas que padecen esta afección les cuestan mucho hacer estas sencillas actividades o, sencillamente, no pueden hacerlas.

Esta dolencia aparece tras una lesión cerebral, pero se sigue manteniendo la capacidad de coordinación y motora indispensable para realizar cualquier tipo de movimiento. Dependiendo del hemisferio cerebral dañado afectará a distintas actividades de la vida diaria. Las principales causas que derivan en esta dolencia son accidentes cerebrovasculares, tumores, enfermedades neurodegenerativas, demencias o lesiones cerebrales traumáticas.

Las personas con esta dolencia son altamente dependientes, puesto que necesitan ayuda para cualquier tarea cotidiana

El Neurólogo alemán Hugo Liepmann a principios de siglo XX presentó su estudio sobre la apraxia distinguiendo tres tipos:

  • Apraxia ideatoria: La persona afectada es capaz de manipular objetos, los reconoce, los puede nombrar y saben cuál es su función. Pero a la hora de manipularlos no sabe, omiten los pasos para su utilización o no los usa de forma adecuada. Un ejemplo de este tipo de apraxia es al a hora de vestirse y ponerse la camiseta por los pies.
  • Apraxia ideomotora: La persona afectada tiene plena capacidad para realizar cualquier tipo de acción y manipulación de objetos, pero no pueden realizarlos. Son incapaces de imitar cualquier tipo de gesto. Por ejemplo, a la hora de peinarse se ven con dificultades para orientar el peine; o a la hora de comer, no orientan correctamente en el espacio los cubiertos.
  • Apraxia motora: La persona afectada tiene dificultad en organizar acciones en el espacio. Ejemplo de ello puede ser a la hora de montar una maquinilla de afectar, se verán incapacitados para hacerlo.

Las lesiones en el hemisferio derecho derivarán en apraxias del vestido, constructiva y trastorno de la escritura y cálculo. Las lesiones en el hemisferio izquierdo derivarán en apraxias del habla, oral, ideatoria, constructiva o ideomotora.

Las personas con apraxias son altamente dependientes, puesto que necesitan ayuda en su día a día para realizar tareas cotidianas. No existe un tratamiento específico para esta dolencia. Existen en la actualidad fármacos que retardan el avance. La terapia ocupacional o fisioterapia es una buena alternativas para la mejora de los pacientes.

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